Como seguramente sabes, el Sistema de Administración Tributaria distingue, a grandes rasgos, entre dos tipos de contribuyentes: las personas físicas —individuos— y las personas morales —empresas—. Sin embargo, existe un término que puede generar confusión: el de las personas físicas con actividades empresariales.
A grandes rasgos, este concepto hace referencia a personas que se dedican al comercio o participan en alguna industria por cuenta propia, sin conformar una empresa. También abarca a contribuyentes que generan ingresos por autotransporte, a raíz de la agricultura, de la ganadería o de la pesca.
Pero, ¿sabes cuáles son las implicaciones de tributar bajo este régimen? En este artículo te explicamos a profundidad qué es el régimen fiscal de personas físicas con actividades empresariales.
Además, te decimos cuáles son sus obligaciones, ventajas y desventajas, así como cuáles son los otros regímenes en los que te puedes registrar, de acuerdo a las actividades que realizas.