La importancia de la contabilidad en una organización va mucho más allá del cumplimiento de obligaciones fiscales. La contabilidad administrativa está orientada a analizar y producir datos de alto valor para la administración interna de una empresa, lo que la hace un elemento práctico y beneficioso para tu empresa. 

En este artículo te contamos qué es la contabilidad administrativa, por qué es importante y qué beneficios puede significar para tu negocio. Además, detallaremos las diferencias entre la contabilidad administrativa y la contabilidad financiera para que tengas un panorama completo de ambos sistemas contables.

¿Qué es la contabilidad administrativa? Claves para entenderla

La contabilidad administrativa es un tipo de contabilidad que se enfoca en analizar, medir y presentar información para uso interno de la administración o gerencia de una empresa. La contabilidad administrativa se enfoca en ejercer como una herramienta versátil y ajustable, que los directivos de la empresa pueden utilizar según sus metas y estrategias de negocio. 

Características de la contabilidad administrativa

Dentro de los múltiples factores que definen a la contabilidad financiera, podemos destacar las siguientes características:

• Analiza información tanto financiera como no financiera.
• Está dirigida principalmente al personal administrativo y gerencial.
• Es pragmática y flexible, pues se ajusta a necesidades específicas.
• No está sujeta a una serie de lineamientos externos que escapan del control de la organización.
• Sus parámetros son establecidos completamente por la empresa.

Como podemos concluir de esta lista, una de las ventajas de la contabilidad administrativa es que es completamente ajustable a lo que requiera la empresa en un momento determinado. Sus parámetros y variables, así como el tipo específico de información con los que opera son a pleno criterio de la organización, lo que la convierte en un sistema de datos fundamental para el crecimiento de tu negocio. 

Cómo funciona la contabilidad administrativa

Para ilustrar de qué nos sirve la contabilidad administrativa, analicemos el siguiente ejemplo:

Imagina que recientemente el equipo de innovación de tu negocio diseñó un producto prometedor que se distribuye en una sola de tus tiendas. En este caso, es fundamental tener información medible para evaluar el desempeño de esta iniciativa. Ahí es donde la contabilidad administrativa se convierte en un recurso invaluable. A través de ella, puedes generar un informe detallado de la facturación de dicha tienda en el período específico de implementación del nuevo producto. Además, puedes tomar decisiones estratégicas en caso de que los resultados no coincidan con lo esperado. 

Pero esa no es su única función. También es sumamente útil para elaborar presupuestos, controlar el gasto, realizar un análisis financiero en torno a una negociación con inversionistas o hacer una proyección del crecimiento empresarial. En este sentido, también se le conoce como contabilidad gerencial, debido a que el enfoque de los datos obtenidos está orientado al uso administrativo y a la gestión de la empresa. 

Contabilidad administrativa vs contabilidad financiera: ¿cuáles son sus diferencias?

Una gran diferencia entre contabilidad administrativa y financiera tiene que ver con el uso de los datos en función del tiempo. Mientras que la contabilidad financiera se enfoca en describir lo que sucedió en la empresa en el pasado, la administrativa pretende establecer qué acciones se deben tomar de cara al futuro. 

Otra diferencia importante es a quién va dirigida la contabilidad administrativa en contraste con la financiera. Dado que el objetivo de esta última es cumplir con los requerimientos estandarizados, tanto nacionales como globales, sus variables y parámetros dependen completamente de las instituciones reguladoras. Por el contrario, en la contabilidad administrativa tienes la libertad total para modificar y ajustar dichos parámetros. 

Finalmente, nos gustaría destacar otra diferencia clave en la periodicidad. Mientras que en la contabilidad financiera los plazos para emitir los estados financieros son fijos e innegociables (por ejemplo anualmente), en la contabilidad administrativa puedes definir los períodos de tiempo a analizar según lo que requieras. 

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